BLASFEMO
LA FRASE DEL DÍA:SEAMOS FELICES La virtud del ateo - Deberías saber por qué ?

jueves, 9 de octubre de 2008

Excepción -----UNA CARTA A CORAZÓN

Esta es una carta que nunca le entregué a una persona que conocí en un curso de fotografía. Es el momento en que solo dije hasta luego, que nadie podrá sacarme este sentimiento que llevo dentro.Comparto estas líneas y espero que algún día pueda estar junto a ella...

Para:
...
Una vez más sentí que volaba dentro de todos los mágicos momentos que pude pasar contigo.Tu sonrisa en medio de mis palabras eran la base perfecta para sentirme en otro mundo, fue una droga sin sentido, un éxtasis donde mis sentidos se partían en moléculas, y en donde mis ojos se desmenuzaban cada vez que te encontraban.
Mirarte se volvía un juego de mil palabras donde la razón jugaba con mi corazón, donde la tristeza se apagaba con la alegría, pues tus caricias eran las que atinaban a secar cada lágrima mía.Me hubiera gustado besarte aquel martes por la noche; frío e intenso como los demás días, con las ordas en medio del apagado cielo de la ciudad, pude sólo decirte unas cuantas palabras y luego te fuiste para no volverte abrazar nunca. Ya no quedará ninguna prueba por resolver, ya no se podrá armar una revolución en tu corazón, donde las partículas más extrañas siempre terminaban por decirle sí a mis palabras.
Amas lo viajes como yo te amo a ti, sientes el placer de verte cruzando fronteras cuando yo quiero cruzar el sentir de tus manos, cuando quiero hacerte mía, estar en medio de una noche con una copa de vino, unos cuantos cigarros y hacer el amor juntos. Si esto es poder llegar a la plenitud de la felicidad pues te diré que lucharía porque se diera, pero no podemos imaginar nuestras almas juntas cuando nuestros cuerpos están tan lejos , cuando tus ojos ya no se reflejan en los míos, cuando tu cintura ya no se posa en la mía, cuando tus besos ya no están en mis labios, cuando tus manos ya no atraviesan mi alma...Sólo mirar el horizonte imaginándonos juntos como dos fieras envueltas una en la otra.

Las horas pasan sin saber nada de ti, sin tener tu voz impregnada, otra vez, en mi mente; es , por así decirlo, las mil y un maneras en las que el destino nos pondrá a prueba, donde esperarán a que la impaciencia se desborde por los lagos de nuestros sentimientos, y no se sabrá cuánto más habrá que esperar.
Los tiempos cambiarán y no sé cómo nos encontraremos, quizá con el mismo fuego que encendimos, capaz con el mismo deseo de besarnos hasta que nuestros labios se sequen, o sólo será un cálido abrazo que nos una de nuevo.

Te deseo a más no poder, cada vez que veo tu foto te imagino , yo con un carboncillo en medio de mi cuarto trazando tu silueta de una forma única en el vacío de mi lienzo; y es que no encuentro otra forma de poder tenerte cerca mío, de poder besarte mil veces más. No quisiera pensar en nada que no te involucre, no quisiera ver que la lógica se vea comprometida con los sentimientos, quisiera que pienses en mí alocadamente, como si fuera la primera vez que deseas a alguien.
No tientes a tu corazón con otros sentimientos de los cuales te puedas arrepentir, imagina sólo una mañana despertando conmigo a tu lado, entre besos y abrazos de los que nadie podrá evitar.
Hay deseos que se pueden cumplir cuando estás despierto, el nuestro es verdadero; llamaradas se inclinarán ante nuestros caminos, guiándonos hacia un mismo sendero , hacia una misma verdad, esa verdad que nos enaltece y que nos hace vivir cada día más.
Quizás sea un soñador del cual quiere despertar para ver lo construido, pero sólo me gustaría ser una pieza de nuestro propio juego, de nuestra propia vida , de todos los sentimientos que se propagan alrededor nuestro. Ya las cosas están hechas,y ni tú ni yo podrá cambiarla; espero que siempre tengas presente que estaré esperando el momento en el cual pueda quedarme dentro de ti, sé cómo hacerlo, y me gustaría que tú compartas las mismas cosas que yo quiero compartir contigo, sé también que tú me quieres y que me deseas tanto como yo a ti, es de sólo esperar a que los tiempos cambien y que nuestros corazones, no.


Has más vernos